El cuerpo de Julio López López, de 32 años de edad, uno de los chiapanecos que perdió la vida en el tráiler en San Antonio, Texas, el pasado 27 de junio.

Llegó la madrugada del viernes a la colonia Benito Juárez, municipio de La Concordia, Chiapas, donde vivía desde varios años atrás junto a su esposa Adriana Guadalupe González Hernández y sus tres hijos.

COME DE MAS EN UN BUFFET Y LE COBRAN DOS VECES,

Uno de ellos, de cuatro años de edad, fue diagnosticado con Trastorno de Espectro Autista, razón por la que decidió conseguir prestado 250 mil pesos para pagarle a unos polleros que prometieron llevarlo a Estados Unidos.

Julio tenía la ilusión de trabajar allá para poder comprar los medicamentos que su hijo necesita diariamente y darle una mejor calidad de vida a su familia, lamentablemente su sueño no se cumplió. Descanse en paz.

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